lunes, 5 de abril de 2010

Ciencias Sociales - 1° año - Técnica N° 2

Geografía


Para ubicarse en la Tierra

Meridianos y paralelos

Como si se tratara de un tablero preparado para el juego de la batalla naval, se ha trazado sobre la superficie terrestre una red de líneas imaginarias que permite localizar cualquier punto.
Esas líneas son los paralelos y los meridianos.
Los paralelos son círculos imaginarios que tienen como centro el eje terrestre. El Ecuador es el círculo o paralelo máximo, que divide la Tierra en dos hemisferios, el hemisferio Norte, también llamado
Boreal o Septentrional, y el hemisferio Sur, conocido como Austral o Meridional. Otros paralelos importantes son los círculos polares Ártico y Antártico y los trópicos de Cáncer y de Capricornio.
Los meridianos son líneas imaginarias que unen ambos polos. Desde fines del siglo XIX se convino que el meridiano de 0 º sea el que pasa por la ciudad inglesa de Greenwich. Quedan así definidos dos hemisferios: el hemisferio oriental y occidental, hacia el Este y hacia el
Oeste del meridiano de 0 °, respectivamente.
Para localizar cualquier punto del planeta sólo hay que indicar su latitud y longitud.
❚ Latitud: es la distancia medida en grados desde cualquier punto de la superficie terrestre al Ecuador; va de 0 ° a 90 ° y puede ser norte o sur.
❚ Longitud: es la distancia medida en grados desde cualquier punto de la superficie terrestre al meridiano de Greenwich; va de 0 a 180 °, y puede ser este u oeste.
Los puntos cardinales
Todas las acciones humanas están relacionadas con algún fenómeno geográfico. Aunque no nos demos cuenta; simplemente, elegir un camino para llegar a un lugar determinado supone conocer muchos conceptos geográficos.
Para ubicamos en el espacio hay que tener en cuenta los cuatro puntos cardinales: Norte,
Sur, Este y Oeste.
❚ El Este u oriente es la dirección donde vemos “salir” el Sol, por eso llamado Levante.
❚ El Oeste u occidente es la dirección en la cual vemos “ponerse” el Sol, llamado Poniente.
❚ El Norte y el Sur pueden ubicarse de la siguiente manera: si miramos al Este y extendemos los brazos, el Norte estará marcado por el brazo izquierdo y el Sur, por el brazo derecho; a la espalda, tendremos el Oeste.
Entre los cuatro puntos cardinales: Norte, Sur, Este y Oeste existen puntos intermedios que se representan en la “rosa de los vientos”.

Longitud y latitud
Una vez trazados los meridianos y los paralelos sobre un plano o carta geográfica u oceanográfica, se puede establecer la latitud y la longitud de cualquier punto situado sobre la superficie terrestre, tanto en la tierra como en el mar.

Rosa de los vientos
La concepción de la “rosa de los vientos” se basó en la dirección de los ocho vientos principales, en relación con los cuatro puntos cardinales, cuyas referencias básicas son el movimiento aparente del Sol y el plano del horizonte.


La Tierra, nuestra casa
Desde tiempos remotos, los primeros habitantes de la Tierra necesitaron conocer los fenómenos naturales para realizar sus actividades de todos los días. Las horas de “salida” y “puesta” del Sol condicionaban, mucho más que en la actualidad, algunas actividades cotidianas. También necesitaban ubicarse en amplios espacios, y para eso reconocían algunos relieves terrestres, cursos de agua y tomaban ciertos puntos de referencia fuera de la Tierra, como el Sol, la Luna y las estrellas. La satisfacción de necesidades básicas, como la alimentación, la vivienda y la salud, motivaron la observación y el registro del medio en el que vivían y también del espacio exterior.

El Sistema Solar
El Sistema Solar es el conjunto de cuerpos celestes que gira alrededor del Sol, que es una estrella.
El Sol tiene 9 planetas orbitando a su alrededor. Además, hay satélites, asteroides y cometas.
❚ Los planetas son astros de forma aproximadamente esférica y no tienen luz propia.
Giran alrededor del Sol siguiendo un recorrido preciso de forma elíptica llamado “órbita”.
❚ Las estrellas son cuerpos celestes en estado incandescente. Están formados por masas esféricas de gases cuya temperatura oscila entre los 3 000 ºC y los 22 000 ºC . Las estrellas emiten energía en forma de radiación luminosa y por eso poseen luz propia. En relación con la temperatura, las estrellas se clasifican en: blanco azuladas (las de mayor temperatura); amarillas (de temperatura media) y rojizas (de menor temperatura).
❚ Los satélites son cuerpos celestes más pequeños que los planetas y giran alrededor de éstos, siguiendo una órbita.
❚ Los asteroides son planetas muy pequeños que giran alrededor del Sol entre dos planetas y tienen forma irregular. Los científicos suponen que se formaron por la explosión de planetas.
❚ Los cometas son astros luminosos que recorren órbitas elípticas alargadas a grandes velocidades a través del espacio. Su estructura está formada por una cabeza, una cabellera (que es una aureola luminosa) y una cola de varios millones de kilómetros de longitud.

La Tierra en el Sistema Solar
El Sol es el centro del Sistema Solar y su diámetro es 109 veces mayor que el diámetro terrestre. La Tierra forma parte del Sistema Solar. Es el tercer planeta a partir del Sol y posee características que no tienen otros planetas del Sistema, por ejemplo, su atmósfera con oxígeno, el agua líquida en su superficie y los seres vivos que lo habitan.
En cuanto a masa y tamaño, después del Sol, los cuerpos más importantes del Sistema son los planetas. Sus masas son más pequeñas y no tienen la temperatura suficiente como para emitir luminosidad propia. Sin embargo, cuando los observamos por las noches, parece que emiten luz. Esa luz no es más que el reflejo del Sol.
Los planetas del Sistema Solar pueden agruparse de la siguiente manera:
❚ planetas menores o interiores son aquellos que se encuentran más cerca del Sol:
Mercurio, Venus, Tierra y Marte, que son rocosos.
❚ planetas mayores o exteriores son Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno, formados principalmente por hidrógeno y helio. Plutón, el planeta más pequeño del Sistema Solar, no se considera dentro del grupo de los planetas exteriores porque es un planeta rocoso. Entre Marte y Júpiter se ubican alrededor de unos 40 000 asteroides conocidos; son de pequeño tamaño y el conjunto tiene el nombre de cinturón de asteroides.

El origen del Sistema Solar
Muchas hipótesis intentan explicar el origen del Sistema Solar; no obstante, dos de ellas son las que tienen mayor aceptación. Una hipótesis sostiene que el Sistema Solar se originó por el choque de dos estrellas. Quienes sostienen esta posibilidad aseguran que, al pasar tan cerca una de otra, la más pequeña fue atraída por la de mayor fuerza. Esto permite suponer que la estrella más ligera habría desprendido los fragmentos a partir de los cuales se formaron todos los elementos del Sistema Solar. En la actualidad la hipótesis más aceptada por los astrónomos sostiene que el Sistema Solar pudo haberse formado a partir de una nebulosa de gas y polvo cósmico.
Sus seguidores afirman que el Sol originario probablemente se formó mediante la concentración de materia en el centro de esa nebulosa que, al girar concentrándose en discos y tras sucesivos choques, habría formado los planetas del actual Sistema Solar.
Los planetas más cercanos al Sol recorren su órbita en menor tiempo que los más alejados. Por eso, el año, es decir, el tiempo que tarda en completarse una órbita, tiene una duración distinta para cada planeta. Además, los planetas giran sobre sí mismos, cada uno de ellos con velocidad propia. Cada giro es un día.
El Sol ilumina en todo momento una mitad de la Luna. Sin embargo, día tras día la vemos distinta, porque su visión desde la Tierra depende del lugar en que se encuentra la Luna en su órbita alrededor de ella. Esto genera las llamadas fases: luna nueva, cuarto creciente, luna llena y cuarto menguante. Cuando hay luna nueva no podemos apreciarla desde la Tierra; en cuarto creciente, su parte iluminada va aumentando a diario; la luna llena se ve clara y totalmente iluminada; en la fase de cuarto menguante comienza a perder su luminosidad hasta llegar otra vez a luna nueva.

El “rey” Sol
La energía solar es imprescindible para la vida. El Sol proporciona toda la luz y el calor necesarios para que sea posible la vida en la Tierra. Civilizaciones antiguas, como las de los incas, los aztecas y los egipcios le asignaban un papel muy importante. Estos pueblos, entre otros, sostenían que el Sol era el origen del funcionamiento de la naturaleza y lo ubicaban en el centro de sus cultos religiosos y del ordenamiento del tiempo.
Nuestro Sol es la estrella más próxima a la Tierra, ya que la distancia media es de unos
149 600 000 km. La luz solar tarda 8,3 minutos en llegar a la Tierra. El Sol gira sobre sí mismo y también alrededor de nuestra galaxia. Tiene una temperatura de 4 200 ºC, aunque en su núcleo puede llegar hasta los 15 millones de grados. El elemento más abundante en su composición —y que le sirve de principal combustible— es el hidrógeno (71%), seguido por el helio (27%).

La Luna, satélite de la Tierra
La Luna es el único satélite de la Tierra; se encuentra a una distancia de 384 000 km de nuestro planeta. Se mueve alrededor de la Tierra y, al mismo tiempo, gira sobre su eje. Como realiza ambos movimientos en 29 días aproximadamente, siempre vemos la misma cara de la Luna.
La influencia de la Luna sobre las aguas oceánicas produce un movimiento de ascenso y descenso denominado marea, que se percibe en las costas. En noches de luna llena hay pleamar o altas mareas; en tanto que con luna nueva hay bajamar o mareas bajas.

La forma de la Tierra
Las ideas acerca de la forma de la Tierra fueron cambiando con el paso del tiempo. Los antiguos egipcios pensaban que la Tierra tenía forma de huevo, mientras que durante la Edad Media europea se la representaba como un plano rodeado de océanos con abismos en sus bordes.
Uno de los primeros que sostuvo que la Tierra es esférica fue el filósofo griego Pitágoras (580- 500 a.C.) y luego Aristóteles (384-322 a.C.) expresó con claridad la idea de que todo lo que está sobre la Tierra es atraído hacia el centro por una fuerza llamada fuerza de gravedad.
La Tierra es el tercer planeta del Sistema Solar en relación con el Sol. Tiene una forma esferoide o geoide (que significa “forma propia de la Tierra”), es decir, una esfera ligeramente ensanchada en el Ecuador y achatada por los polos. La superficie terrestre es de 510 101 000 km2.

Movimientos de la Tierra
La Tierra, como todos los planetas del Sistema Solar, tiene dos movimientos:
❚ el de rotación, por el cual gira sobre sí misma en sentido Oeste-Este alrededor de un eje
que pasa por ambos polos, durante un día;
❚ el de revolución o traslación, por el cual gira alrededor del Sol recorriendo una órbita elíptica, que dura 365 días y seis horas. Las seis horas anuales se van acumulando y cada cuatro años se establece un año bisiesto (6 horas cada 4 años suman 24 horas).

Las cuatro estaciones

Las cuatro estaciones del año se producen por la inclinación del eje terrestre en relación con el plano de su órbita alrededor del Sol. Los hemisferios Norte y Sur tienen estaciones opuestas en determinada época del año: cuando en el Norte es verano, en el Sur es invierno.
N: PRIMAVERA
S: OTOÑO
N: OTOÑO
S: PRIMAVERA
N: VERANO
S: INVIERNO
N: INVIERNO
S: VERANO


Actividades
1. Averigüen en qué fechas comienzan las distintas estaciones del año en nuestro país.
Busquen avisos publicitarios de agencias de turismo.
¿Qué lugares turísticos de nuestro país se ofrecen en las diferentes estaciones?
¿Cuáles son las opciones recreativas para cada región?
2. Busquen publicidades con ofertas turísticas fuera de nuestro país. ¿En qué estación del año se encuentra el área promocionada? ¿Coinciden con las de nuestro país? ¿Por qué?

Historia

1- Leer el texto, el cual da una información que no tiene cohesión ni coherencia.
2- Rescribir el texto como corresponde.
3- Una vez realizado el punto 2, elaborar un eje cronológico (línea de tiempo), en el que se registren la Prehistoria y la Historia y las edades de la Historia. Señalar los hechos más importantes de cada una.
4- Dar tres ejemplos donde modifiques los siglos en años, y tres donde modifiques los años en siglos.
5- Escribir en por lo menos tres renglones, ¿cuál es para vos la utilidad de la Historia?

¿Cuándo empezó la Historia?
Porque en el siglo VI un viejo monje griego, Dionisio el Pequeño, que vivía en Roma, propuso dividir la historia a partir del nacimiento de Jesús y tomar este acontecimiento como el año cero.
¿Por qué al año 2002 le corresponde el siglo XXI?
Se toma como fecha de inicio de la Historia la de la aparición de la escritura, cuando el hombre pudo poner por primera vez sus ideas e impresiones por escrito. Esto ocurrió en Súmer, una ciudad-estado de la Mesopotamia (Asia Anterior), hace unos 5000 años.
La Historia se divide en "edades" a partir de hechos muy importantes que trajeron aparejados grandes cambios.
¿En qué etapas se divide la Historia?
Aquí comienza la Edad Moderna que concluye con la Revolución Francesa de 1789.
Entonces el siglo I transcurrió del año cero al año 99, es decir no hubo "siglo cero", por eso te parece que vamos un siglo adelantados y a veces te confundís cundo lees " 25 de mayo de1810, siglo XIX".
La Historia se divide en "edades" a partir de hechos muy importantes que trajeron aparejados grandes cambios. La primera es la Edad Antigua y transcurre entre la aparición de la escritura hasta la caída del Imperio Romano de Occidente en el 471 d.C. Este hecho da inicio a la Edad Media , que se prolonga hasta la caída del Imperio Romano de Oriente (Bizancio) en manos de los Turcos en 1453.
¿Quiénes escriben la Historia?
La historia sirve para muchas cosas. En primer lugar para conocer el pasado, para saber de dónde venimos. Esto es lo que nos va a permitir saber a dónde vamos. En segundo lugar nos ayuda a entender lo que nos está pasando ahora, porque el presente es el resultado de nuestro pasado.
Los historiadores, basándose en diferentes elementos a los que se los llama "fuentes". Hay fuentes escritas, como documentos, cartas, libros; orales, como las historias y relatos que se fueron transmitiendo de generación en generación, como las cosas que te cuentan tus abuelos y tus papás sobre cómo era nuestro país en otros tiempos; arqueológicas, como monumentos, objetos antiguos que nos pueden dar datos valiosísimos sobre civilizaciones extinguidas.
Con la Revolución se inicia la Edad Contemporánea que es la que todavía estamos viviendo, aunque algunos historiadores dicen que a partir del bombardeo atómico a la ciudad de Hiroshima (6 de agosto de 1945) se inició la Era Nuclear.
¿Para qué sirve la Historia?
A partir del estudio y la comparación de las distintas fuentes y del trabajo de investigadores anteriores, los historiadores van armando la narración histórica. Podés encontrar a veces sobre un mismo hecho versiones distintas. Esto tiene que ver con que cada historiador, puede darle una interpretación distinta a los hechos de la historia. Esto lejos de hacerla dudosa, la enriquece porque nos ayuda a pensar de diferentes formas sobre un mismo acontecimiento.
En tercer lugar nos sirve para no volver a cometer los mismos errores que se cometieron en el pasado y para recordar (del latín re-cordi = volver a pasar por el corazón) las situaciones buenas y malas que fueron formando la cultura, la forma de ser, la historia de nuestro país. Ese pasado no ha muerto, permanece presente en el mundo que nos rodea, nos pertenece a todos y por lo tanto, tenemos todo el derecho de conocer lo que nos pasó.
Autor: Felipe Pigna.

Geogarfía clases: Martes 13 de abril


Estructura interna de la Tierra
Hace millones de años, nuestro planeta era una esfera incandescente que se fue enfriando; su capa más externa se solidificó formando la corteza. Hacia el interior, están las otras dos capas que conforman su estructura interna: el manto y el núcleo.
Dentro de la Tierra
El núcleo interno de la Tierra es de
hierro sólido y está rodeado por un
núcleo externo líquido y un delgado
manto de rocas. Las estructuras rocosas
que podemos ver en la superficie son
en realidad parte de la corteza, cuyo
espesor varia entre 5 y 70 km.
La Tierra, un rompecabezas
El meteorólogo alemán Wegener fue considerado loco cuando en 1912 expuso una teoría que revolucionó las ideas geológicas existentes hasta ese momento. Observando un planisferio, advirtió que los contornos de África y Sudamérica coincidían como las piezas de un rompecabezas.
Esta observación y posteriores estudios le permitieron elaborar una teoría según la cual todos los continentes estuvieron unidos en un gran “supercontinente”, al cual llamó
Pangea (palabra de origen griego que significa “todas las tierras”). Según Wegener, esa masa continental se fue fragmentando y se formaron dos grandes continentes: Laurasia y Gondwana que siguieron separándose hasta llegar a su conformación actual. El proceso continúa.
Esta idea fue rechazada por sus contemporáneos, quienes consideraban que los continentes ocuparon siempre una posición fija. La teoría de Wegener ha sido comprobada a través de investigaciones geológicas que plantean la existencia de una zona de expansión en la que los continentes se separan y un área donde se acercan, denominada zona de subducción.
La corteza de la Tierra está conformada por una docena de placas, denominadas placas tectónicas, de aproximadamente 70 km de grosor. Estas placas, de movimientos tan lentos como imperceptibles, han originado continentes y relieves geográficos en un proceso que ha llevado millones de años.
El relieve
La superficie terrestre presenta diversas formas y alturas: montañas, extensas llanuras, mesetas y sierras. El conjunto de formas y alturas que presenta la superficie terrestre se denomina relieve.
De acuerdo con su ubicación, los relieves pueden clasificarse en:
❚ relieves oceánicos o de tierras sumergidas, superficies cubiertas por aguas y que representan el 70% de la superficie terrestre;
❚ relieves continentales, en contacto con la atmósfera y que ocupan el 30% de la superficie de la Tierra.
El hemisferio Norte posee mayor porcentaje de superficie continental, por este motivo se lo denomina también hemisferio continental. En el hemisferio Sur la proporción de aguas
es mayor, por eso se denomina hemisferio oceánico o marítimo.
Las tierras forman seis continentes (Asia, América, África, Antártida, Europa y Oceanía) rodeados por cinco océanos (Pacífico, Atlántico, Índico, Antártico y Ártico).
Las alturas de las tierras emergidas y las profundidades de las tierras sumergidas se miden en relación con el nivel del mar o cero metro.
Formación del relieve: causas endógenas y exógenas
Los paisajes que actualmente vemos son el resultado de procesos muy largos. En su formación actuaron fuerzas provenientes del interior del planeta, denominadas causas endógenas, y fuerzas o fenómenos que tienen su origen en el exterior de la corteza terrestre, denominadas causas exógenas.
El relieve terrestre es el resultado de la combinación de ambos procesos, internos y externos.
Las causas endógenas se refieren a dos tipos de movimientos:
❚ los movimientos orogénicos se producen por la colisión de dos placas tectónicas y dan origen a encadenamientos montañosos, por ejemplo, la cordillera de los Andes;
❚ los movimientos epirogénicos son movimientos muy lentos, generalmente imperceptibles, de ascenso y descenso de las placas tectónicas; cuando las placas descienden, las aguas del mar avanzan sobre las áreas más bajas.
Los movimientos internos de la Tierra también originan fenómenos tales como los terremotos y las erupciones volcánicas. Los terremotos se producen por movimientos vibratorios de la corteza terrestre; las erupciones volcánicas resultan de la salida de magma del interior del planeta a través de grandes chimeneas. Terremotos y erupciones volcánicas son movimientos terrestres violentos que generalmente dejan graves secuelas para los habitantes del lugar en el que ocurren.
Los procesos exógenos tienden a alisar o nivelar el relieve. Este proceso se denomina erosión y es producido por la acción de agentes externos: la temperatura, las lluvias y el viento. También tiene relación con la actividad humana, que puede provocar que la erosión se acelere o se mantenga bajo control.
Relieve continental
En las tierras emergidas, el relieve presenta una gran variedad de tipos de formaciones. Las principales formas del relieve emergido o continental son: las llanuras, las montañas y las mesetas.
❚ Llanuras: son terrenos planos y extensos con desniveles muy leves. Se ubican a una altura menor de los 200 m respecto del nivel del mar. Las grandes llanuras del planeta están atravesadas por enormes ríos. Por ejemplo: el río Yangtsé recorre la Gran Llanura China; el Mississippi cruza la llanura que lleva su nombre; el Amazonas está en la llanura Amazónica; y, en nuestro país, los ríos Paraná y de la Plata pertenecen a la llanura Chaco-Pampeana.
❚ Montañas: elevaciones rocosas de la superficie terrestre que, en general, superan los
600 m sobre el nivel del mar. Si sus formas son redondeadas, se trata de montañas viejas; en cambio, si sus formas son agudas con laderas empinadas y pendientes pronunciadas, son montañas jóvenes que aún no han sufrido el desgaste producido por los agentes externos.
Cuando las montañas están alineadas, se denominan cordones o cadenas. Varias cadenas forman una cordillera. Cuando son de baja altura, se denominan sierras o colinas. Las depresiones alargadas que separan cadenas montañosas se llaman valles; y las que están totalmente rodeadas de montañas se denominan bolsones.
❚ Mesetas: son terrenos planos y extensos ubicados a alturas mayores de 200 m sobre el nivel del mar. Pueden estar separadas por valles estrechos y profundos que originan grandes desniveles.
Cuando se encuentran a gran altura sobre el nivel del mar se llaman altiplanicies o altiplanos.
El relieve oceánico
El fondo de los océanos también tiene un complejo relieve. Debido a que no recibe la acción de los factores exógenos, el relieve oceánico es mucho más regular que el relieve continental.
Las principales formas del relieve oceánico son:
❚ llanuras abisales (extensas zonas planas en el fondo oceánico);
❚ dorsales oceánicas (semejantes a grandes cordilleras submarinas);
❚ quebradas u hoyas submarinas.
Desde el borde costero y hacia el interior del mar, las zonas reciben diversos nombres y tienen características que las diferencian.
La zona más próxima a la costa se denomina plataforma continental. Tiene hasta 200 m de profundidad y en algunas zonas llega hasta los 1200 km de la costa.
Es la zona de los océanos hasta donde penetra la luz solar. Por este motivo, allí se desarrolla la mayor variedad de especies acuáticas. En algunas plataformas continentales se han localizado importantes depósitos de minerales y de petróleo.
El zócalo o talud continental es el desnivel que se produce entre la plataforma continental y las profundidades marinas.
Las fosas abisales son las zonas más profundas del relieve submarino.

La atmósfera
La atmósfera es la capa gaseosa que envuelve y protege la Tierra. La porción de la atmósfera que está en contacto con la superficie terrestre se denomina troposfera. En la troposfera se producen todos los fenómenos meteorológicos que permiten la vida en nuestro planeta.
La atmósfera está compuesta por una mezcla de gases que forman el aire. Los principales gases que componen la atmósfera son el nitrógeno y el oxígeno.
Las proporciones de los gases que componen el aire varían según la altura, pero puede decirse que el nitrógeno está presente en un 78% y el oxígeno, en un 21%. Otros componentes de la atmósfera son el dióxido de carbono y el vapor de agua. En la atmósfera hay además algunos elementos no gaseosos, como polvo atmosférico (compuesto por muy pequeñas partículas de tierra, hollín y cenizas volcánicas) y materia viva microscópica (hongos, bacterias y polen de plantas).

El tiempo meteorológico y el clima
Generalmente, antes de salir de casa queremos saber qué temperatura hace, si está nublado o salió el Sol; si llueve, hay viento o nevó. A veces, las condiciones varían durante una jornada: puede haber una mañana nublada y con temperaturas muy bajas, lluvia al mediodía y Sol por la tarde. Los cambios de las condiciones meteorológicas que ocurren en un momento y un lugar determinados configuran lo que llamamos tiempo meteorológico.
Cuando nos referimos al clima de una región, en cambio, consideramos los rasgos particulares y permanentes del estado atmosférico de esa región del planeta.
La caracterización del clima de una zona determinada se obtiene a través del registro de temperaturas, humedad, precipitaciones y vientos durantes largos períodos.

Componentes del clima
Los elementos que conforman el clima son: la temperatura, la presión atmosférica, la humedad, las precipitaciones y los vientos.
La temperatura
La temperatura expresa el grado de calor que posee un cuerpo. La temperatura ambiental se refiere a la temperatura de la atmósfera. El calor proviene de los rayos del Sol. Los rayos solares atraviesan la atmósfera en forma de radiación (luz). La Tierra los absorbe y los devuelve al aire como calor. La temperatura suele variar según la influencia de los siguientes factores.
❚ Latitud: a medida que nos alejamos del Ecuador, la temperatura baja a razón de 1 ºC cada 180 kilómetros. En las áreas cercanas al Ecuador, los rayos inciden perpendicularmente sobre la superficie terrestre. A medida que nos alejamos del Ecuador hacia los polos, los rayos inciden en forma cada vez más oblicua y, por consiguiente, disminuye la cantidad de radiación recibida por la atmósfera y la Tierra.
❚ Altitud: la temperatura disminuye con la altura: 1 ºC cada 180 m, porque, a medida que ascendemos, el aire se hace menos denso y, por consiguiente, disminuye la capacidad de absorber toda la energía calórica que envía la Tierra.
❚ Distancia al mar: la superficie terrestre se calienta y enfría más rápidamente que las aguas, que tienen mayor capacidad de retener el calor. Por ello, en zonas cercanas al mar, la temperatura es más uniforme que en el interior de los continentes donde la diferencia térmica, entre el día y la noche y entre las estaciones del año, es más pronunciada. Esa diferencia se denomina “amplitud térmica”.
❚ Vientos y corrientes marinas: los vientos y las corrientes, fríos o cálidos, disminuyen o aumentan la temperatura de las áreas de influencia.

Calentamiento global de la atmósfera
En los últimos diez años, los científicos han registrado un aumento de la temperatura de la Tierra y anuncian un futuro aún más caliente. Las actividades económicas que requieren la quema de combustibles fósiles (gas y petróleo) producen un impacto directo sobre el proceso de calentamiento, conocido como el “efecto invernadero”.
En ese proceso, algunos gases de la atmósfera, como los vapores de agua, el dióxido de carbono
(CO2) y el metano (llamados gases invernadero) atrapan el calor del Sol en las capas inferiores de la atmósfera. Sin este efecto, nuestro planeta se congelaría y nada podría vivir en él; pero la excesiva acumulación de calor tiene consecuencias no deseadas, como el derretimiento de los cascos polares. El aumento de la temperatura del planeta genera más evaporación del agua de los océanos y como dicho vapor actúa como un gas invernadero, posibilita mayor calentamiento; es lo que se llama efecto amplificador”.

La presión atmosférica
La presión atmosférica es la fuerza que ejerce la atmósfera sobre la superficie terrestre, es decir, el peso del aire. La presión sobre el planeta no es uniforme y su variación depende de los siguientes factores.
❚ Altitud: a medida que aumenta la altura, disminuye la densidad del aire. Por lo tanto, a mayor altura, menos presión.
❚ Temperatura: cuando el aire se calienta, se dilata y asciende; por ello su peso disminuye.
Al enfriarse, se comprime, aumenta su peso y desciende. Por este motivo, a mayor temperatura, la presión es más baja y a menor temperatura, la presión es más alta.
La humedad
La humedad es la cantidad de vapor de agua contenida en la atmósfera. La humedad de la atmósfera proviene, principalmente, de la evaporación del agua de ríos y océanos. Ese vapor asciende hasta llegar a las capas frías de la atmósfera. Allí el vapor se condensa y pasa del estado gaseoso al líquido y forma las nubes, que se componen de pequeñas gotas de agua o agujas de hielo.

Las precipitaciones
Las corrientes de aire provocan el choque de las gotas de agua que forman las nubes. Las gotas aumentan de tamaño en cada choque hasta que no pueden mantenerse flotando en el aire y se precipitan. Las precipitaciones caen sobre la superficie terrestre en forma de lluvia, nieve o granizo.
Según el modo en que se producen, las precipitaciones se clasifican de la siguiente manera.
❚ Lluvias convectivas: se producen en zonas cálidas y húmedas cercanas al Ecuador. En esas zonas, las altas temperaturas provocan la evaporación casi constante del agua. Al ascender a las capas superiores de la atmósfera, el vapor se condensa y provoca abundantes lluvias. Este fenómeno se registra, casi a diario, en el mismo lugar donde se produce la evaporación y dura todo el año.
❚ Lluvias orográficas: se producen en zonas montañosas. Las montañas se interponen al paso de vientos húmedos y las masas de aire húmedo ascienden, disminuyen su temperatura y precipitan. Si la temperatura es menor que 0 º, las precipitaciones se producen en forma de nieve y los vientos pasan secos al otro lado de la montaña.
❚ Lluvias frontales: se producen por el choque frontal de dos masas de aire de diferentes temperaturas: una de aire caliente y húmedo con otra de aire frío y seco. Debido a su mayor peso, la masa de aire frío se ubica debajo de la de aire caliente, y empuja el aire caliente y húmedo hacia arriba; al enfriarse, precipita en forma de lluvia.
Cantidad de lluvias
Según la cantidad de milímetros anuales, las lluvias se clasifican en:
excesivas (más de 2000 mm);
abundantes (de 1000 a 2000 mm);
suficientes (de 500 a 1000 mm)
escasas (de 200 a 500 mm);
insuficientes (menos de 200 mm).


Los vientos
Los vientos son masas de aire que se desplazan de un lugar a otro. Este movimiento se debe a las diferencias de presión entre zonas de altas presiones que emiten vientos (áreas anticiclónicas) y zonas de bajas presiones (áreas ciclónicas) que los reciben. Cuanto mayor es la diferencia de presión, mayor será la velocidad de los vientos.
Los vientos no soplan en línea recta sino que la rotación de la Tierra les otorga un movimiento circular: en el hemisferio Norte soplan en el sentido de las agujas del reloj y en el hemisferio Sur en sentido contrario.
Los vientos se pueden clasificar en permanentes, periódicos y locales.
❚ Permanentes: cuando soplan todo el año en la misma dirección. Por ejemplo, los vientos alisios que soplan desde las regiones tropicales en dirección al Ecuador. Los alisios del
Norte soplan desde el Nordeste en el hemisferio Norte; y los alisios del Sur soplan desde el
Sudeste en el hemisferio sur. Los vientos constantes del Oeste que soplan en las latitudes medias y los vientos polares son vientos permanentes .
❚ Periódicos: estos vientos cambian su dirección según la estación del año o el momento del día. Es el caso de los vientos monzónicos del verano, que se originan en los anticiclones oceánicos y son atraídos por los centros ciclónicos continentales del centro de Asia, originados por las altas temperaturas estacionales. Son cálidos y como provienen del océano son húmedos.
Durante el invierno, el centro del continente, que está más frío, se convierte en un centro anticiclónico que emite vientos fríos y secos hacia el mar. Otros vientos periódicos son las brisas marinas que durante el día soplan desde el mar (que está más fresco) hacia el continente y en dirección contraria durante la noche.
❚ Locales: soplan en una región determinada siempre en la misma dirección, en nuestro país encontramos el pampero (frío y seco), la sudestada (frío y húmedo) y el zonda (cálido y seco).

En un anticiclón (alta presión) las corrientes de aire descienden en el centro. Normalmente producen un tiempo fresco y despejado.

Tipos de clima
En nuestro planeta existe una gran variedad de climas. De acuerdo con la combinación de temperatura y precipitaciones se clasifican en tres grandes variedades: climas cálidos, templados y fríos.
Clima cálido
Zonas de temperaturas superiores a los 18 ºC durante todo el año y precipitaciones medias anuales abundantes y excesivas (superiores a los 1200 mm). Este tipo climático se extiende en el área intertropical. Dentro de la variedad de clima cálido se distinguen las siguientes variedades.
❚ Cálido ecuatorial: temperatura media anual de entre 25 y 27 ºC, sin grandes diferencias de temperatura entre el verano y el invierno. Las precipitaciones superan los 2000 mm y no se registran vientos.
❚ Cálido tropical: temperatura media anual de 22 ºC (18 ºC en invierno y 24 ºC en verano).
Las precipitaciones son cercanas a los 1500 mm y se registran fuertes vientos.
❚ Cálido subtropical: veranos calurosos e inviernos frescos (15 ºC). Las precipitaciones están cercanas a los 1200 mm y pueden registrarse durante todo el año (sin estación seca), o puede haber una estación en la que llueva menos (con estación seca).
❚ Cálido desértico: altas temperaturas durante el día (más de 35 ºC) y muy bajas durante la noche (-10 ºC). Las precipitaciones son muy escasas, inferiores a los 100 mm.
Clima templado
Este tipo climático presenta temperaturas moderadas y las cuatro estaciones bien marcadas.
Se localiza en las latitudes medias y posee las siguientes variedades.
❚ Templado oceánico: temperatura media anual de 15 ºC (10 ºC en invierno y 20 ºC en verano) y las precipitaciones se aproximan a los 1 000 mm, durante todo el año. Corresponde
a zonas cercanas a las costas y recibe la influencia moderadora del mar.
❚ Templado continental: diferencias de temperatura muy marcadas entre el invierno (–10 ºC) y el verano (23 ºC); las precipitaciones, cercanas a los 600 mm, se producen en verano; los inviernos son secos. Se ubican en zonas mediterráneas, es decir, en el interior de los continentes.
Clima frío
Este tipo climático presenta temperaturas medias anuales inferiores a los 10 ºC y precipitaciones medias anuales variables. Se distinguen las siguientes variedades.
❚ Frío continental: temperatura media anual de 5 ºC (–12 ºC en invierno y 20 ºC en verano); las precipitaciones cercanas a los 500 mm se producen durante el verano; los inviernos son secos. Se ubica en el interior de los continentes, al norte de la zona de clima templado continental.
❚ Frío nival: temperatura media anual de –15 ºC (–26 ºC en invierno y 3 ºC en verano); inviernos largos y fríos; veranos cortos y frescos; las precipitaciones, cercanas a los 400 mm, en forma de nieve y con fuertes vientos. Se ubica en zonas próximas a los polos.
❚ Frío húmedo u oceánico: temperatura media anual 5 ºC (1 ºC en invierno y 9 ºC en verano); las precipitaciones son abundantes, próximas a los 1000 mm. Se ubica en zonas cercanas a los océanos.
❚ Frío de altura o clima de montaña: la temperatura desciende con la altura y se registra todo tipo de climas, desde la base hasta la cima de la montaña. Presenta cumbres nevadas eternas. La cantidad de lluvia es variable. Según la humedad de los vientos que chocan con las laderas, una será lluviosa y la opuesta, seca.
❚ Árido frío o desértico: predominan bajas temperaturas y las precipitaciones son escasas (hasta 300 mm). Se caracteriza por la gran amplitud térmica (–10 ºC en invierno y 8 ºC en verano). Se localiza en zonas continentales de gran altitud.